Su actuación ha sido doble. Por una parte han limpiado de todo tipo de adherencias el edificio de las antigua Serrerias Belgas (principios del XX), dejando a la vista el hormigón que forma su esqueleto, dándole a la estructura un aire brutalista mientras se recuerda su historia industrial
Eliminando muros medianeros se ha construido espacios diáfanos, haciéndoles continuar hacia el exterior los espacios gracias al uso de grandes cristaleras sobre los antiguos muros de cierre
En ellos, entendidos como salas de usos múltples (talleres, conferencias, grupos de trabajo) se han incorporado elementos de estética minimal (muy adecuados al entorno) y vivos colores pop (acaso sería mejor decir posmodernos), que nos recuerdan a la idea del Pompidou de dar protagonismo a las conducciones y elementos tradicionalmente ocultos
En segundo lugar, y como obra nueva, se ha realizado un módulo central en el patio que sirve como escalera distribuidora. En este espacio lleno de espacios ortogonales se ha insistido en el color (un vibrante amarillo), las formas industriales que dejan a la vista los tirantes y, de nuevo, los ventanales.
Gracias, Vicente.
ResponderEliminarLa rehabilitación que han hecho es espectacular, y tú lo explicas estupendamente.
¡Saludos!