lunes, 29 de julio de 2013

LA PLAZA MAYOR DE TEMBLEQUE


En nuestro recorrido por las plazas mayores (Madrid, Almagro...) nos encontramos con este magnífico ejemplo de arquitectura popular del siglo XVII de Tembleque.

Como ya hemos ido comentando estas plazas mayores sirven como centro de actividades comunes (reuniones, corridas de toros, procesiones...), situándose el ayuntamiento (del XVII) en su centro como símbolo de poder (aunque el origen del pueblo y el espacio hay que buscarlo en la Orden de San Juan que controlaba la villa y cuyos escudos aún decoran los pilares)

La estructura, realizada en madera y yeso, se organiza por medio de pies derechos (pilares y columnas de piedra en el piso bajo) que elevan dos corredores abiertos (perfectos palcos para los espectáculos) tras los que se sitúan las viviendas.

Es especialmente destacable la labor de carpintería de los accesos laterales.



domingo, 28 de julio de 2013

LA PLAYA DE LA MALVARROSA


De lo que conozco, la mejor playa urbana.
Quien la conociera hace ya bastante años no sabría reconocerla. Su enorme arenal que nunca se llena, su paseo para bicicletas o el simple paseo, su arena fina, los fantásticos chiringuitos en donde tomarse un arroz (aunque cada vez más caro).

La misma playa que pintara Sorolla, que paseara Blasco Ibáñez (cuya casa se encuentra muy cerca), ahora es un lugar magnífico para pasar el día, bien comunicado por coche, autobús o el famoso tranvía a Malvarrosa de Manuel Vicent (el que llegaba a las Arenas, un balneario reconvertido en hotel lujoso).





 Casa de Blasco Ibáñez
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Y por si fuera poco, detrás suyo, el famoso Cabañal y sus casas modernistas, ese mismo lugar que el ayuntamiento quiere destruir (ya lo está haciendo) para un poquito más de especulación inmobiliaria)




















sábado, 27 de julio de 2013

LEONARDO COCINERO. Un libro para conocerlo


Leonardo era, antes que pintor, era músico, tal y como se presentó en la corte de  los Sforza en Milán. Y tramoyista, e ingeniero, e inventor, físico, químico, creador de armas, maestro de ceremonias, sastre... y cocinero.
Precisamente a esta faceta (que desarrolló especialmente en la corte milanesa) va dedicado este libro. (Y es que es poco conocido  que Leonardo, en comanda con Botticelli, regentará varios restaurantes en el mismo Ponte Vecchio, los Tres Caracoles y La Enseña de las tres ranas. En él intentará una verdadera nouvelle cousinne que poco éxito tendrá)
Extraido del códice Romanoff es libro es un maravilloso repaso de la mente y los intereses de Leonardo.
Comienza con sus recetas. Él, un vegetariano convencido, tuvo que realizar todo un arte culinario para satisfacer a su mecenas Sforza. Desde las fastuosas patas de vacas (enteras) a lo Bernardo a las recetas de polenta (plato sumamente habitual en la época), Huevos a la Salai, cabra con gelatina, anguila, testículos, mermeladas, sopas, ensaladas, las famosas flores de calabacín (fior de zuchine)

                                             
  Una segunda parte está dedicada a los consejos en donde se entremezclan ciencia y magia, aunque encontraremos verdaderas sorpresas que cualquier dietista de hoy en día da como ya supuestas. (En este apartado, como buen renacentista, hay un hueco para los venenos, que según la leyenda tuvo que emplear en la práctica)
En los inventos culinarios aparece el Leonardo ingeniero, con fantásticos diseños (descomunales, posiblemente utópicos) para cocinar los grandes banquetes. Sierras accionadas por ocho caballos que que llevaba los troncos al horno, fregadoras de suelo, moledores de vacas, e incluso un sistema antiincendios). Entre sus grandes inventos está la conversión de la pasta traida de China de Marco Polo (entonces casi utilizada como decoración) en los actuales spaguetti
El último, Modales y usos de la corte, nos remite al Leonardo cortesano en esa nueva sociedad en la que la sofisticación es un adorno más que deben portar los grandes.


viernes, 26 de julio de 2013

jueves, 25 de julio de 2013

LA CASA DE LOS PICOS. SEGOVIA


En la subida hacia la plaza mayor y la catedral se encuentra este magnífico ejemplo de arquitectura civil renacentista.
Fechado a finales del XVI y principios del XVI, sus elementos clasicistas han ganado volumen sobre el anterior plateresco, como puede verse en molduras o en el magnífico arco de medio punto de la entrada.

Sin embargo, hay un elemento que aún lo ancla a la tradición anterior, sus famosos picos o puntas de diamante que algunos autores relacionan con el renacimiento genovés.

Realizados en granito y ocupando toda la fachada rompen con el ideal de muro desnudo, sobrio, en donde destaquen los principales elementos arquitectónicos, algo tan típico del purismo.
Frente a ello, las formas geométricas tienen una importante función, la de jugar con la luz (especialmente rasante) que transforma por completo la arquitectura según la hora del día, proyectando luces y sombras de una forma que nos recordaría a su posible modelo (la casa de las Conchas) pero se integrarían también perfectamente en el espíritu de racionalismo radical de un Juan de Herrera.





















miércoles, 24 de julio de 2013

LOS JARDINES DE CECILIO RODRÍGUEZ. EL RETIRO


Cecilio Rodríguez es uno de los grandes jardineros que tuvo el parque y a él, debemos, como ya vimos aquí, el diseño de la Rosaleda.
Otra de sus grandes realizaciones fueron estos jardines que llevan su nombre, realizados como una continuación a la casa de Fieras (también realizados por él)
Utilizando un espacio largo y estrecho (actualmente vallado y sólo abierto los días de diario), en él recreo las ideas de la jardinería meridional (el jardín andaluz romántico del que aún nos quedan grandes muestras en el Parque de Maria Luisa de Sevilla, los Reales Alcázares de Sevilla o Córdoba o en el Generalife de la Alhambra). En él se busca la claridad y el orden clásico con ciertos ecos islámicos (la presencia de un agua constante y rumorosa, el color y olor...) para crear lugares de paseo pero también de reposo o de discretas (casi ingenuas) aventuras.
El jardin se organiza en un gran eje flanqueado por setos recortados de ciprés y distintos parterres y jalonado por fuentes.

Alguna de ellas es circular (y más tardía en su decoración) y otras instaladas en largas albercas que acompañan al paseo central, solado de forma ajedrezada.

Tanto en el paseo central como en sus laterales la arquitectura clasicista (columnas y pérgolas) son decoradas con hiedra hasta convertirlas en columnas salomónicas.

También en sus lados largos los cipreses recortados nos incitan con sus laberintos verdes a la exploración, acaso el secreto o la confidencia

En todo el jardín varias parejas de pavos reales terminar por poner el toque tardorromántico de todas las realizaciones.

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martes, 23 de julio de 2013

EL PERSONAJE DALÍ COMO UNA OBRA DE ARTE


Aunque denostado por muchos, su propia personalidad es toda una verdadera obra de arte ( ser sublime, vivir y dormir ante un espejo), con la construcción de un personaje que no se limitó a pintar sino que tomó la vida real como el marco perfecto para la obra de arte total 
 Egocéntrico, extravagante (en Londres dio una charla con escafandra porque se proponía descender al subconsciente), contradictorio hasta dar a la paradoja el valor de categoría, en su actitud «vital» de enfant terrible hubo también mucho de mercadeo (el Ávida Dollars de Breton, la estafa de sus últimas obras tan sólo firmadas por él en blanco), y esperpento. 
Experto en manipular narcisistamente la realidad y gran conocedor de los medios, se autoproyectó como personaje casi de ficción que tanto podía reunirse con Franco como dedicarse a observar las moscas posadas en sus bigotes velazqueños untados de miel, abriendo una nueva modalidad de artista espectáculo que tanto explotó Warhol
Dentro de todo este proyecto la presencia de Gala fue decisiva (algunos hablan que tras su estela Dalí cambió el arte por el dinero). Para Dalí era la Gradiva (desde novela de Jensen interpretada por Freud), una categoría superior a la musa que se fundió con Dalí.



lunes, 22 de julio de 2013

LA MEZQUITA DE OMAR EN MADRID. M-30


Aunque oficialmente se denomina mezquita de Omar, los madrileños la conocen como la de la M-30. No parece mal día hoy, en pleno Ramadán, dedicarle el primero de los dos post que ofreceremos en el blog sobre ella.
Inaugurada en 1992 y financiada por el gobierno de Arabia Saudí, se encuentra en el barrio de San Pascual, blanca y reluciente.

En ella se demuestra de qué manera, aparentemente tan sencilla, se puede combinar el arte islámico con las tendencias actuales de la arquitectura que buscan pureza de líneas, juegos de volúmenes, gustos por texturas...
Construida por un gran volumen horizontal que se despedaza, como si fuera un juego de construcciones, en volúmenes menores que son definitivamente controlados por el alto alminar.
En las ventanas encontramos desde los modelos corridos que pusiera de moda Le Corbusier a los típicos arcos geminados o los apuntados, utilizando en ellos finas celosías de formas geométricas y vegetales (lacerías y atauriques), mientras que en el mirab hay sugerencias a los mocárabes.



Para una visión general es interesante cruzar el reciente puente de la M-30, del que hablaremos otro día, para ver su imagen de gran navío sobre el talud de la carretera de circunvalación


domingo, 21 de julio de 2013

LA PLAYA DE LIAÑA


Hay que tomar el desvío que nace del mismo pueblo de Cóbreces y bajar un par de kilómetros para encontrarse esta playa recogida y verde de Liaña.

Como siempre ocurre en el norte el lugar nos cambiará de forma asombrosa según las mareas, aunque siempre nos quedará un buen arenal (y su aparcamiento).

Los dos restaurantes que se encuentran junto a la misma arena son fantásticos y nos permiten pasar un día completo (si el tiempo lo permite) de playa.

Las imágenes hablan por sí mismas


sábado, 20 de julio de 2013

HISTORIA DE LOS ESTILOS EN JARDINERÍA. Francisco Páez de la Cadena


Tradicionalmente el jardín ha sido una de las disciplinas más olvidadas en la Historia del Arte, añadiéndose (si es que se hace) como último epígrafe de los distintos estilos, como una forma más de decoración.
Sin embargo han existido en la Historia estilos que la han considerado como una parte esencial de sus edificios (sería casi imposible concebir la Alhambra sin sus jardines o Versalles sin los suyos), en ocasiones realizados para un jardín determinado.
Por otra parte, la jardinería nos puede enseñar mucho de la ideología de los estilos, pues se encuentra íntimamente emparentada con su forma de entender la Naturaleza (y  la relación del hombre con ella), las relaciones sociales (la fiesta, especialmente cortesana, se desarrolla en el jardín) o las propias ideas predominantes (orden, armonía, contacto con la naturaleza…).

                                                 
  Nosotros, en nuestros blogs, nos hemos acercado a estos jardines en numerosas ocasiones (aquí tienes un índice). En estos trabajos el libro que hoy presentamos ha sido de gran ayuda, pues permite no sólo conocer las formas de jardín sino también relacionarlas con el pensamiento y estética del momento, abriéndonos así las perspectivas para comprender los distintos estilos.

jueves, 18 de julio de 2013

Las esculturas del Parque Juan Carlos I. Homenaje a Agustín Rodríguez Sahagún . Toshimitsu Imai


Toshimitsu Imai , fallecido en 2002, formó parte de la explosión informalista que tuvo también sus ecos en Oriente, siendo "descubierto" por Tapie.
La obra que tenemos en el Parque Juan Carlos I pertenece a su obra final y ya ha perdido la agresividad típica del estilo para retornar a la tradición de los jardines zen convenientemente renovados.
Como puede apreciarse en las imágenes los dos jardines de arena y piedras se sitúan aislados por un muro de hormigón "flotando" sobre las aguas del gran estanque.

No existe vegetación, pues son jardines minerales en donde las rocas crean (en metáfora) lo que el espectador guste ver. Su apilamiento y organización, en apariencia casual, está sumamente pensada y responde a las típicas formas asimétricas, de equilibrio inestable y correspondencias sutiles típicas de lo oriental. (El wadi sabi del que ya hablamos aquí)

A intervalos también irregulares las rocas tienen algunas partes doradas, el oro como color de la eternidad (que fue muy utilizado por autores de los años 50, como Yves Klein, con sentido espiritual).

Como es habitual en todas las esculturas del parque, éstas están pensadas en función del paisaje y necesitan de la colaboración del espectador (que ha de moverse en torno suyo) para percibir dichas relaciones.
En concreto el Homenaje juega a contraponer la idea de "flotación" cuando las vemos posadas sobre el agua, con la de pequeño acantilado, de accidente orográfico cuando las observamos volcadas sobre las cascadas, como pequeñas montañas (tan típicamente oriental  también)










































miércoles, 17 de julio de 2013

LA CATEDRAL DE BAEZA. REENCONTRANDO A VANDELVIRA


Mezquita aljama reconvertida desde el siglo XIV es remozada totalmente a partir del XVI por la mano de Vandelvira.
Para su desarrollo el arquitecto tomó las ideas maestras de la catedral de Granada, realizada por Diego de Siloé, que consiguió modernizar las fábricas góticas de la catedrales a las formas renacentistas.
De planta basilical y tres naves se recurre a un haz de columnas clásicas (que sustituyen a los tradicionales pilares con baquetones góticos) que se recrecen por medio de la utilización del dado brunelleschiano (trozo de arquitrabe sobre el capitel)

Sobre esta estructura se desarrollan bóvedas vaídas que superan a las nervadas aún en Granada y terminan por convertirse en una de las marcas de estilo de Vandelvira.

En el crucero, aunque también rebajada, se utiliza la cúpula de media naranja, como ya hemos visto, totalmente desarrollada, en el Salvador de Úbeda.

Para los muros se recurre a la repetición de arcos triunfales coronados por ventanas que repiten el motivo palladiano.


 Con todos estos métodos se consigue una arquitectura diáfana y serena, luminosa y de motivos rítmicos que recuerdan (a una escala mayor) a los experimentos brunelleschianos en Santo Spiritu o San Lorenzo, acabando definitivamente con las formas góticas para estas grandes fábricas (como las que sigue utilizando la coetánea Catedral de Segovia)

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